Brasil aprobó este 25 de marzo una nueva ley conocida como Marco Civil (Wikipedia), dirigida a generar un balance entre los derechos civiles y el Internet. La ley es válida para ciudadanos brasileños, pero permitirá regular lo que empresas extranjeras como Google o proveedores de Internet pueden hacer con los datos de los ciudadanos.

Una de las propuestas originales de esta ley era que los datos de los ciudadanos estuvieran alojados en servidores dentro del país. Esto obligaría a toda red social o sitio web a levantar servidores en Brasil, pero luego de meses de negociaciones se aprobó que los datos de ciudadanos brasileños están protegidos por las leyes de su país, a pesar que estén en servidores y sitios web en el extranjero.

Parte de esta protección a los usuarios es fijar en la ley la protección a los datos y privacidad de su información. Parte de las razones para proteger a los usuarios fueron las revelaciones de Edward Snowden sobre el espionaje de Estados Unidos al gobierno y empresas del país. Una cita diplomática entre Dilma Rousseff y Barack Obama fue cancelada por Brasil luego de esas revelaciones.

La ley incluye, además, la neutralidad en la red, la cual protege al usuario y empresas de recibir una velocidad inferior para navegar en sitios web que no sean socios del proveedores de Internet.

La ley, que algunos llaman Constitución del Internet, está siendo estudiada a nivel internacional y es muy probable que sirva de referente para legislación en otros países. Varias naciones de América y Asia están actualmente negociando un acuerdo transpacífico o #tpp, y será interesante ver cómo leyes del estilo del Marco Civil o regulaciones regionales de la Unión Europea sobre derechos humanos y civiles en Internet van formando legislación y derecho en distintos países y regiones.